Computadores usados en Armenia

En el año 2020 en Colombia, el 60.7% de los hogares no tenía un computador (Portafolio, sep. 2021). Para nadie es un secreto que el celular y los dispositivos móviles desplazaron al PC. Pero debido a la virtualidad, muchas familias debieron adquirir un computador ya sea de escritorio o portátil.

La pandemia causó que, debido al teletrabajo y la virtualidad educativa en casa, muchos debieran adquirir un computador y con la economía pasando por uno de sus peores momentos desde que quien escribe tiene conocimiento, la opción de comprar usados tomó más fuerza.

Muchas personas tienen razón, cuando afirman que comprar algo usado o de segunda es muy riesgoso y sí . Pero también es cierto que, hasta productos nuevos, vienen con defectos de fabrica o incluso se dañan a los pocos días de uso y para que den la garantía hay que luchar batallas épicas.

Comprar un producto en Colombia, no es lo mismo que adquirirlo en un país desarrollado como E.E.U.U o España, donde el comprador puede llevar el producto usarlo varios días y si no funciona o no cumple sus expectativas, puede devolverlo y le reintegran su dinero o lo cambia por otro producto.

En Colombia esta situación conlleva a una desesperada disputa, discusiones, a pelear incluso en el ámbito jurídico, situación que lleva meses o años.

Por esta razón, muchas personas prefieren conseguir un producto en un 25, 30, 35, o 40% del valor en el mercado y ahorrar un dinero considerable y en la mayoría de ocasiones, resolver una necesidad, ya que muchos de quienes venden, salen de sus productos, no por malos, sino por poco uso, porque se van del país y venden todas sus pertenencias baratas, para irse.

En conclusión, estrenar era muy satisfactorio antes de la pandemia, ahora se ha convertido en un lujo y comprar productos usados como computadores, tabletas, celulares etc, donde se puede conseguir un producto en un 25% de su valor nuevo, da la opción de que si se daña, usted pueda comprarlo hasta 4 veces más y dejarle a la suerte si le dura pocos días o toda la vida.

Andrés Zuluaga.